sábado, 26 de abril de 2014

quequienismo

¿qué somos? artistas con minúscula pero sin más vueltas. hay que callar al molino. regar la tierra. criar los hijos. soltar las riendas. salir a andar.

visitamos la tierra de nuestros bisabuelos.

antes de visitar el pasado: la imaginación.
A través de la cerradura oxidada de la casa del bisabuelo espiamos retazos. Los olores del vino, los chanchos, las rosas. Retumban las prohibidas frases que escuchamos.

Del tiempo cuando la pulpería era iglesia. El barman curandero, y se vislumbraban tras la sierras las siluetas de lo que somos. 

pre-visita día 2

En la tierra
sobre donde
los astros
se vuelven

estrellas

post-visita 1

Los fantasmas son las hojas, el portón, los pasos, las sombras, las deudas, los dichos, los baños, el vado, las repeticiones, el desconcierto, el desierto, la ignorancia, la vagancia, la coraza, la pastilla, el placebo, el horror, la sombra, la mano, la mano en la ventana de la infancia, la culpa, la iglesia, el frío, la escalera imaginaria de alfombra roja en la parte de atrás del campanario que nos lleva al infierno, un dedo que te llama por la espalda, un dedo que dice no, una uña larga en el oído, el pis frío del invierno en la escuela, la burla, la mueca, el misterio, el silencio, la otra, el eco, los chismes, los supuestos, los fantasmas. Los fantasmas somos todos. Con el alma perdida, confundidos, sospechando de todo y acechando buscamos, preguntamos, chequeamos, amenazamos. Asamos. Asamos al asador la vida y la carne. Asamos los fantasmas al espiedo y los regurgitamos en espasmos.
Los fantasmas son agujeros, culpa, culpa, culpa. Una úlcera, una ampolla alrededor de vos, de yo y del resto, las lagunas, los espacios, las estaciones, el tiempo. Carretilla, barco, carreta, umbral, arcada, memoria, bar, sol, teatro, escapada, taburete, sombrero y canto. ¿Qué? ¿Qué tanto ruge la historia? ¿O qué busco al lado del miedo? ¿Por qué lucho para que estas raíces dejen. ¿Por qué calla el molino y habla sólo cuando quiere? ¿Qué nos dicen las alejas? ¿Qué quiere el molino, con sus vueltas, vueltas, engranajes oxidados y esas moscas? ¿Qué tiene el pozo que contiene el poso de mi historia con sus grietas? ¿Qué no fluye al arroyo y llega al mar? ¿Qué queda escondido delante de las sierras? Artillas, polillas, ramas, astillas, puntillas, pandillas. Pórtland, arena, orquillas, horquillas, víbora. Pedazos, destrucción, fuerte, imagen. El pueblo a la derecha, al fondo, la civilización y dentro preguntas y qué. ¿Qué busco entre esta nada para evitar  o rondar algún otro qué? ¿Qué es lo que late en esta tierra por ponerle un lugar? Un círculo, otro círculo otro círculo, un espiral, espiralado de caracol que enrosca, víbora, qué, qué, qué. Una imagen, una historia. Mujeres mueren jóvenes, llegan otras, mueren. Lloran. Lloran. Lloran. Mueren lloran chicos. Chicos, hijos prenden fuegos las bolsas que cargan qué, las atan, al molino que da vueltas, y de lejos, ojos de fuego giran para hacer historia y quemar los restos de qué.